Hace 65 millones de años, Keeper, el guardián de las Energems, unos cristales que poseen un gran poder, fue derribado por Sledge, un caza-recompensas intergaláctico empeñado en hacerse con el poder de las gemas y conquistar el universo. Keeper se estrelló en la Tierra prehistórica, donde confió las gemas a un grupo de dinosaurios para que las guardaran, y destruyó la nave de Sledge con una bomba, dejándole atrapado en la órbita de la Tierra. Desafortunadamente, esto provocó que los asteroides que Sledge había recogido como pago durante sus viajes cayeran en forma de lluvia sobre el planeta, provocando la extinción de los dinosaurios.